Alexander Could es un chico americano de quince años de edad, quien extraña lo agradable y tranquila que era su vida antes de que su madre contrajera una terrible enfermedad, volviendo los días tristes y difíciles y la personalidad de Alexander algo amargada, iniciando el primer párrafo del libro con una pesadilla del muchacho en la que su madre es secuestrada por un enorme pájaro negro. Una vez que ha despertado, seguimos al chico hasta la cocina en la que nos presentan a los demás miembros de la familia, mientras nos cuentan una que otra cosa.
Mas tarde Alex está en la escuela, pero debe regresar porque se le ha olvidado la flauta en casa, tendrá ensayo con la orquesta de la escuela, él es el solista y no puede faltar. Nota algo extraño en cuanto llega a su hogar, y al entrar a una habitación ve a su padre cortando con una navaja el cabello de su madre. En un arranque de ira, Alexander Could ataca a su padre y después huye a su cuarto, en donde se encierra y empieza a destruir todo a su paso.
Finalmente sale y se disculpa con su padre, después de todo lo mejor era cortar el cabello antes de que este empezara a caerse naturalmente por mechones. Conversa un momento con su progenitor, quien la da una noticia desagradable: la madre de Alex debe tomar un largo tratamiento lejos del lugar donde viven, acompañada por el padre, mientras que los niños tendrán que quedarse con las abuelas. Las hermanas de Alex se quedaran con la normal abuela del lado materno, pero él tendrá que el ir con la terrible Kate Could, una mujer de personalidad complicada, periodista especializada en viajes y quien planea llevarlo de viaje al Amazonas, en la búsqueda de la Bestia, una extraña criatura gigantesca. Alex participará en una extraña aventura en el Amazonas, en compañía de Nadia Santos y un curioso Chamán, se adentrará a un mundo misterioso y mágico en donde habitan espíritus y dioses, en donde ''se borran los límites de la realidad y el sueño''.
Debo admitirlo, este libro me dio una grata sorpresa, empezando por los personajes. En un principio, la personalidad de Alexander me pareció muy agresiva al igual que la de su abuela, mientras que Nadia me daba como que cosita, sin embargo, después de una o dos páginas logré encariñarme bastante con los personajes. Alexander no sólo es una buena persona, sino que resultó ser bastante tonto, pero no se confundan, eso es parte de su encanto. Kate, por otro lado, ¡rayos jamás creí que pudiera tener un lado tierno! pero es evidente que me equivoqué. Nadia, por otro lado, es una muchacha que siempre da lo mejor de sí misma, a su trece años está llena de confianza y determinación, creo que es una persona admirable, alguien que quisieras llegar a ser, un personaje fascinante y misterioso. También hubo cambios de opinión con otros personajes, pero no diré nada para no arruinarles el libro.
Otra cosa que me gustó mucho fue el final, me gustó bastante como resolvieron todo, fue bastante sorpresivo. La narración es agradable, la historia interesante y cargada de imaginación e intriga, me gusta como se meten mucho en lo que es la naturaleza, en lo importante que es preservarla y cuidarla. Debo decir que aunque me siento satisfecha de haber terminado el libro, también me quedé con un vacío en el corazón, cosa que suele pasar cuando una historia me gusta mucho y no quiero que termine, me quedé con ganas de más. Para aquellos que también se queden con esas ganas de ver a Alex y a Nadia en alguna otra aventura, tienen suerte, porque este es el primer libro de la saga ''de Águila y Jaguar'' siendo los libros que siguen ''El reino del dragón de oro'' y ''El bosque de los pigmeos''. Una lectura ampliamente recomendable.
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